Lo primero que quisiera dejar lo suficientemente claro, es el hecho de que cada proyecto de emprendimiento debe ser visto como un -traje a la medida-, y no puede pretenderse observar como una -receta de cocina-. Es decir, cada modelo de negocio tiene particularidades y características que lo hacen único, aunque se compare con otro que compita dentro del mismo nicho de mercado. A pesar de ello, mi experiencia como asesor, pero en especial como emprendedor desde hace casi una década me ha permitido crear una formula que ha ayudado a mas de 100 emprendedores a transformar una simple idea en un proyecto de negocio real, con productos y servicios que se comercializan con éxito.
A continuación, voy a describir 5 pasos que considero imprescindibles a la hora de emprender cualquier proyecto, independientemente de la naturaleza del mismo.
Paso #1: Construye tu IKIGAI
Para quienes no estén familiarizados con este término japones, se refiere a un concepto que significa “razón de vivir” o “razón de ser”. Todos los seres humanos tenemos un IKIGAI, lo complejo es descubrirlo. Para lograrlo debemos conocernos profundamente, definir nuestras fortalezas y oportunidades de mejora, conectarnos con nuestro ser y conocer cuáles son las emociones que nos movilizan al alcance de una meta. |
Éste paso es elemental, especialmente porque tal y como afirma Daniel Goleman -considerado uno de los padres de la inteligencia emocional- la mayor diferencia entre los seres humanos y el resto del reino animal es precisamente la influencia que tienen las emociones sobre nosotros. Por lo que debemos descubrir que es eso con lo que te conectas emocionalmente para definir una idea de emprendimiento que este alineado con tu ser, porque de no ser así, por muy buena que parezca tu idea, eventualmente va a llegar un momento en el que no te vas a sentir identificado o identificada y allí moriría el motor que te empuje a seguir trabajando por el éxito que buscas.
En resumen, para poder construir tu IKIGAI, debes pensar y documentar lo siguiente: lo que amas, lo que se necesita en tu entorno, por lo que te pueden pagar, y en lo que eres realmente bueno. Luego de escribirlo podrás definir tu pasión, encontrando los puntos en común entre lo que amas y en lo que eres bueno. Tu Misión serán los puntos en común entre lo que amas y lo que se necesita en tu entorno. Tu Vocación serán los puntos en común entre lo que se necesita en tu entorno y por lo que te pueden pagar. Y tu Profesión serán los puntos en común entre lo que eres bueno y por lo que te pueden pagar.
Y el punto en el que coincidan estos cuatros cuadrantes lo vas a definir como tu IKIGAI, fuente de inspiración para un verdadero proyecto de emprendimiento con el que te puedas sentir inspirado a trabajar por ello hasta alcanzar el éxito anhelado.
Paso #2: Define un producto o servicio con una verdadera PROPUESTA DE VALOR
Independientemente, que tu proyecto sea con o sin fines de lucro, debes definir y construir una marca, y de esa marca deben derivarse productos y/o servicios que sean realmente atractivos para un nicho de mercado especifico. Es por ello que debes definir una propuesta de valor o elemento diferenciador que te haga resaltar entre las demás marcas que competirán contigo dentro del mercado que vas a comenzar a invadir.
Mientras tu propuesta de valor sea más grande, mayor será la valoración estimada de cada uno de los potenciales clientes en relación a tu producto.
Paso #3: Hazlo realmente visible, apoyándote en el marketing
Hay un dicho que reza: “lo que no se exhibe no se vende” y así es, para poder definir estrategias de marketing agresivas y focalizadas que te sirvan para irrumpir dentro de un mercado nuevo para ti, debes conocer muy bien tu producto y conocer las verdaderas necesidades de tus potenciales clientes. Toma en cuenta que según el neuromarketing, la mente humana compra sólo por dos razones, por temor o por placer, así que descubre de qué forma tu producto puede reducir algún temor o generar algún placer (dependiendo de tu modelo de negocios) y así podrás definir un speach que te permita realmente persuadir a ese segmento de mercado.
Paso #4: Realiza una planificación estratégica
Estadísticamente el 94% de los proyectos de emprendimiento fracasan antes de los primeros 3 años de vigencia, y en gran medida se debe a que no saben afrontar los nuevos retos del mercado. Por lo que una buena planificación te permitirá anticiparte a posibles escenarios, y especialmente contar con una hoja de ruta que te indique cuales serán las siguientes metas que debes alcanzar, para trasladarte desde el punto en el que te encuentras y así llegar al punto al que deseas llegar.
Paso #5: Define indicadores de gestión
Muchos emprendedores comienzan una idea, y si logran vencer esa difícil barrera de los primeros 3 años, se consiguen con un modelo de negocio con vestigios de solidez, pero muchas veces no saben como monitorear su performance. Por lo que es tan importante definir indicadores en cada área medular dentro del modelo de negocios, por ejemplo: finanzas, ventas, inventario, producción, clientes activos, entre otros, y sólo así podrás monitorear en tiempo real el desempeño de tu emprendimiento, para algún día dejar de ser un autoempleado y dar el paso de comenzar a ser empresario.
Tal y como comencé este artículo, cada proyecto de emprendimiento es único e irrepetible, pero la experiencia me ha confirmado que seguir estos simples pasos te van a garantizar lograr lo que tanto sueñas. Para cualquier consulta adicional estoy completamente a la orden. @Luis_Thielen
Gracias ,el contenido realmente proporciona valor a todo aquel que desea emprender.